Patrimonio

Patrimonio

Desconocemos a ciencia cierta cuáles fueron los orígenes de Valdefuentes; esto no es algo infrecuente si tenemos en cuenta que son muy pocos los lugares en los que con exactitud puede determinarse cuando comenzaron a existir asentamientos y de qué tipo fueron, pero no podemos dejar de hacer referencia a que incluso dentro de lo que es el poblado actual de Valdefuentes se han encontrado muchas y variadas representaciones de cultura que pudiera entenderse como prehistórica o como mínimo prerromana, piezas, vasijas, restos humanos…

De entre los aspectos que más destacan y a la vista están en Valdefuentes un nivel privilegiado ocupan sus edificios históricos, tenemos que hacer referencia a su rico patrimonio arquitectónico: fachadas emblemáticas y monumentos se abren a nuestra mirada testigos estáticos del pasado: El Rollo, El Palacio de Sande, La Audiencia y el Reloj, La Iglesia de nuestra señora de Bienvenida, el Convento de San Agustín…, nuestras heráldicas y esgrafiados, que representan glorias del pasado, pero que constituyen el orgullo del presente en las fachadas que elegantemente los lucen, y que nos hacen pensar que tenemos que preservar su estabilidad, su belleza para que permanezca inalterable en el tiempo, para que otros ojos, los más posibles, puedan contemplarlas en el futuro.

Puentes que en su día sirvieran de paso obligado en zonas de otro modo de difícil acceso en los alrededores del pueblo: Puente sobre el río Salor, La Puente Nueva, Puente del Capellán; Hoy más que nada y obviando el carácter práctico que aún puedan tener, sirven de recreo a la vista y al tiempo, de algún modo estancado bajo las aguas que debieron correr abundantes algún día por debajo de los ojos de estos puentes de origen romano.

IGLESIA PARROQUIAL DE NUESTRA SEÑORA DE LA BIENVENIDA

Obra del siglo XVII, de estilo Barroco. En ella se encuentra la imagen de la patrona de Valdefuentes. Está construida en torno al barrio de Gurumeña, una reducida agrupación de casas cuya estructura urbana se corresponde con las características que son comunes a los asentamientos hispano-musulmanes, de trazados estrechos y tortuosos, callejones sin salida, calles encubiertas y pequeñas plazuelas, que destaca por ser el más antiguo de la localidad.

De su conjunto arquitectónico es preciso destacar la que se considera la joya más preciada del templo: la bóveda del baptisterio, que va en la planta baja de la torre. Es una maravilla realizada en piedra, de estilo de la época de transición del románico al gótico: el llamado cisterciense. Su armoniosa estructura forma una estrella de cuatro puntas, componiéndose cada una de ellas de tres nervaduras que descansan en los ángulos de las rinconadas, terminando en un apéndice de remate adornado con motivos frutales. La pieza central de la estrella es una clave circular de la que parten ocho radios con una subclave cada uno. Todos los elementos convergen en esa gran clave central, formando una serie de arcos apuntados, colgando todo el conjunto a un tercio de la altura de la bóveda, que es una de las características más peculiares del cisterciense.

Mención especial del interior de este templo, merecen igualmente:

El Camarín: pieza de planta rectangular con bóveda elíptica que se expande, formando una cúpula de regular altura con linterna ciega, descansando sobre una cornisa que, mediante pechinas, se resuelve apoyándose en los pilares de las rinconadas.

El Retablo del Altar Mayor: de estilo clásico, bien definido, entonado en claros y suaves colores. Un arco de medio punto, muy abierto, descansa sobre un entablamento apoyado en cuatro gruesas columnas corintias de capiteles dorados; todo ello subordinado a la parte central del retablo, donde destaca un amplio ventanal arqueado, que hace bien visible el trono de la Virgen de Bienvenida, venerada por los vecinos como patrona de Valdefuentes.

Tipo
Iglesia